Aislamiento con ventajas sonoras y estéticas
Un buen aislamiento del techo es fundamental, ya sea por motivos de economía, comodidad o estética. Buenas noticias, ya sea que tenga un presupuesto ajustado o generoso, el aislamiento del techo se ha vuelto accesible para todos. Deco.fr le cuenta todo sobre sus ventajas.
Aislamiento acústico
A nadie le gusta oír el clic de los tacones del vecino sobre su cabeza. Tenga en cuenta que tener placas de yeso en el techo reduce la contaminación acústica en un 50% (cuente alrededor de 6,63 € / m²). ¿Le atrae la elección de lo natural? Piense en el aislamiento térmico natural de “paredes y techos” (alrededor de 8,69 € / m²). Si su presupuesto lo permite, considere la espuma de poliuretano celular, un material fonoabsorbente que se vende en forma de rollo (alrededor de 11,30 € / m²). Sin embargo, hay muchas otras opciones en el mercado, como los revestimientos de corcho acústico (para colocar en el techo, cuesta unos 30 € por loseta de 50 × 50) y los paneles aislantes adhesivos (unos 25,60 € / m²).
Confort optimizado
Quien dice aislamiento, dice reducción de la pérdida de calor y, por lo tanto, comodidad para toda la familia. Una ventaja agradable en invierno (el calor permanece encerrado en la casa) pero también en verano (la ola de calor no penetra en el interior). Hay disponibles múltiples aislantes térmicos: aislantes sintéticos (poliestireno expandido o extruido, o incluso poliuretano para un rendimiento máximo), aislantes naturales (vidrio o lana de roca, fibras vegetales) o materiales renovables (celulosa, perlita o corcho). Cada aislamiento tiene su propio tipo de instalación, ya sean paneles atornillados, rollos para desenrollar o incluso espuma compuesta para pulverizar.
Piensa en el falso techo
Instalar un falso techo puede ser una solución atrevida si quieres disimular las irregularidades o defectos estéticos de tu techo. Además, esta opción promete resultados interesantes en cuanto a optimización del aislamiento acústico y térmico. De hecho, el falso techo reduce la altura de la habitación y, por lo tanto, permite calentarla más fácilmente. Hay diferentes tipos en el mercado: el desenfundable (la mayoría de las veces en lana de roca, perfecto para instalaciones eléctricas), el modelo en yeso (ideal para cuartos húmedos y arquitecturas complejas), o el modelo en textil (rápido de instalar y decorativo). Además, el falso techo viste una estancia y permite jugar con los volúmenes.
¿Conoces el techo con calefacción?
Es bastante posible introducir conexiones eléctricas en su techo para instalar un sistema de calefacción radiante (el calor pasa por el aire para calentar el suelo, los objetos, la piel). Además de proporcionar una sensación de confort, esta instalación tiene el mérito de ahorrar espacio (no necesita radiadores), y de ser más higiénica (el aire no se agita y no produce polvo). El techo calefactado puede ser eléctrico, hidráulico o modular. Cuenta alrededor de 80 € el m² además de la instalación por parte de un profesional.