Revestir una pared con paneles compuestos es bastante fácil de hacer y, además de aislar la habitación, proporciona una superficie limpia y plana para pintar o colgar en la pared, especialmente durante una renovación.
Preparación de las paredes a revestir
Para que los paneles se mantengan bien y no retengan la humedad, la pared sobre la que van a apoyarse debe estar limpia y seca. Por lo tanto, será necesario raspar la pared si se desprende su revestimiento y eliminar todas las irregularidades de la superficie.
Preparación de paneles compuestos
Comenzamos trazando en los paneles compuestos, usando una regla y un lápiz, la ubicación de los recortes. Antes de cortar los paneles con una sierra de mano en el lado opuesto, es mejor hacer un precorte con un cortador, en el lado del aislamiento, de lo contrario los dientes de la sierra pueden quedar atrapados en la lana de vidrio y deteriorarse.
Colocación y acabado
Primero se deben pegar los paneles con llana, en tiras de unos 10 cm y con un espacio de unos 20 cm entre las tiras, antes de dejar secar de 15 a 20 minutos. A continuación, se aplica la cola final en puntos de unos 10 cm de diámetro, aplicada a las tiras de adhesivo confeccionadas previamente, a razón de 4 o 5 puntos por tira. El primer panel se aplicará a la pared presionando muy fuerte, luego comprobamos su adherencia dando golpecitos con la regla, y colocamos el siguiente panel, comprobando la alineación con la regla de albañil y el nivel de burbuja. Una junta realizada con un revestimiento especial completará el acabado.> Solicite un presupuesto gratuito para su aislamiento
