Aunque primero se utilizó como elemento estructural, hoy el hormigón tiene un fuerte poder decorativo. En casa, se puede utilizar como suelo vertido o enlucido así como como pared decorativa o para elementos como encimeras, lavabos o duchas. A continuación se muestran algunos ejemplos del uso del hormigón en la casa.
Concreto en el baño
© MercadierEn el baño, optamos por un revoque de hormigón coloreado que resiste fácilmente las salpicaduras de agua y la humedad. De esta forma, puede revestir las paredes y el encofrado de su bañera para conseguir un efecto muy original.
Hormigón para la ducha
El hormigón también se puede utilizar como elemento estructural. Así, en el baño, el hormigón puede crear un espacio de ducha ya sea en el suelo o en las paredes.
Hormigón en la sala de estar
© MercadierEl hormigón también se instala en la sala de estar, como la sala de estar. A continuación, aporta un estilo muy refinado gracias a su renderizado muy suave y homogéneo. En un tono claro, refleja la luz de la habitación.
Concreto para el comedor
© MercadierEl suelo de hormigón se puede ampliar hasta la zona de comedor donde será fácil de mantener gracias a una capa de barniz adecuada.
Concreto en la cocina
© MercadierAsimismo, el hormigón se adapta fácilmente a la cocina donde no temerá la humedad y las salpicaduras. Incluso resulta ser un suelo práctico.
Hormigón para encimera
© MercadierTambién en la cocina, el hormigón no solo se pega al suelo, también se puede utilizar como material para la encimera. Esto le permitirá crear una continuidad real con el suelo.
Concreto en las escaleras
© MercadierEl hormigón puede asentarse en cualquier habitación de la casa, incluso en pasillos como pasillos o escaleras.
Hormigón para la piscina
© MercadierTenga en cuenta que también puede utilizar hormigón para elementos exteriores como la piscina donde puede crear estructuras para hacer una piscina infinita por ejemplo.