Calidad y material, dos criterios a tener en cuenta
Ya sea que le guste suave, sedoso, cálido o ligero, la ropa de cama juega un papel importante en la calidad de su sueño. Así que para elegirlo con los ojos cerrados, ¡sigue la guía!
Ropa de cama: no comprometa la calidad
Algodón, franela, lino, percal, satén, sea cual sea tu material favorito, ten cuidado con la calidad del tejido. Primero mirando su corte. Una sábana bajera que no se ajustará bien al colchón y es la garantía de acabar con desagradables pliegues, o peor aún, una cama para volver a hacer en mitad de la noche. Luego, apreciando su densidad. Cuanto mayor sea el número de hilos por cm², más apretado será el tejido. Una garantía de calidad, porque la lona será suave y resistente.
No descuides la elección del material para tu ropa de cama
Materiales naturales : el algodón sigue siendo el material más común para la ropa de cama. Y por una buena razón, es el más natural pero también el más cómodo y el más "sólido". También es un material versátil ya que se puede utilizar tanto en verano como en invierno. El algodón peinado más exclusivo ofrece una resistencia y suavidad excepcionales. Si te apetece un baño de suavidad, adopta el satén de algodón con un toque sedoso incomparable. Finalmente, cuando las temperaturas bajen afuera, caliéntese debajo de sus sábanas de franela. Un material súper suave, como el plumón. No recomendado en verano ni en habitaciones muy climatizadas. Finalmente, el lino debe adoptarse por su agradable tacto y su bienvenida frescura, especialmente en verano, por otro lado su mantenimiento es difícil y delicado. Materiales semisintéticos : con en la cabeza, el polialgodón que asocia el algodón y el poliéster. Una alegre mezcla para el verano que además tiene la ventaja de ser más fácil de planchar que el algodón. Por último, la microfibra y su famoso tacto melocotón es una fibra sintética muy fina que aporta mucha suavidad y ofrece una buena sujeción en el tiempo.
Ropa de cama: no descuides las etiquetas
Fíjese bien en las etiquetas cuando compre ropa de cama. Asegúrese de que el material elegido sea fácil de mantener, que pueda soportar temperaturas de lavado de 60 ° C y que sea fácil de planchar.
No olvides el aspecto decorativo de tu ropa de cama.
La ropa de cama participa plenamente en la decoración de su habitación. Asegúrese de elegir colores de tela que combinen con los de su dormitorio. Para no aburrirte de tus adornos, apuesta por tonos lisos con los que mezclarás los colores. Con una tabla de colores de este tipo, puede cambiar el estado de ánimo más fácilmente.