La válvula termostática (o válvula mezcladora termostática) utiliza el mismo modo de funcionamiento que un termostato de radiador. Equipado con un elemento sensible, permite que el agua salga a la temperatura deseada casi instantáneamente sin tener que jugar constantemente con los grifos de agua fría y caliente. Consta de dos asas: una para el flujo de agua y otra que se utiliza para regular la temperatura.
Instalar un grifo termostático en una bañera: ventajas obvias
Para evitar cualquier riesgo de quemaduras, este último está equipado con un cierre de seguridad a 37 ° C o 38 ° C, temperatura de baño ideal para los niños. Además de ofrecer todas las garantías en materia de seguridad, este mecanismo también permite una ganancia en comodidad. El agua fluye a la temperatura adecuada y constantemente. Algunos modelos también ofrecen limitadores de flujo para reducir el consumo de agua.
Elija un modelo de válvula termostática adecuado
Antes de trabajar en su instalación, debe verificar que el agua esté cerrada y que tenga todo el equipo a mano. Las válvulas termostáticas a menudo se venden como un juego, pero es mejor verificar que se proporcionen las juntas necesarias, así como los accesorios. Estos deben adaptarse al diámetro de sus tuberías de suministro. Su nuevo grifo también debe encajar perfectamente entre las dos tuberías. Para ello, es mejor medir la distancia al centro antes de comprar un modelo inadecuado. El sellado es la clave del éxito en la plomería. La cinta de teflón (o el compuesto para juntas y la estopa) se debe colocar en los racores macho siguiendo la rosca, es decir en sentido horario, para que el dispositivo no se deteriore al atornillarlos. Después de haberlos atornillado a tus tuberías, puedes colocar los rosetones decorativos que sirven para disimular esta unión. A continuación, se colocan las juntas en el grifo antes de que este último se atornille definitivamente a los racores.