En forma de barcos, animales, flores o incluso delicias, las velas se han convertido en auténticos aliados decorativos. ¡Y sobre la mesa, saben cómo marcar la diferencia! La prueba en imágenes.
Barcos en el agua
© DelamaisonOriginal y única en su género, la decoración de mesa en versión origami tiene todas las posibilidades de seducir a sus invitados. Especialmente con esas pequeñas velas que parecen barquitos de papel.
Un pez gracioso
© Point à la Ligne¿Te gusta el estilo costero y quieres infundirlo en la decoración de tu mesa este verano? ¡Nada es más fácil! Optamos por estas velas en forma de pez pequeño y listo.
Un conejo único
© Eoptions.netLas mesas de “atmósfera de bosque encantado” son populares, por lo que no hay duda de que se perderá esta nueva tendencia. Adoptamos sin más demora este conejito regordete para adornar la mesa y complacer a sus invitados.
Macarrones gourmet
© Maisons du Monde¡Mmm! Estamos ansiosos por tomar un refrigerio con estos coloridos macarons. Tenga cuidado de no equivocarse, estos pequeños dulces son de hecho velas para decorar.
Rosas para una decoración natural
© Point à la LigneDespués de elegir un mantel blanco y una vajilla verde para darle un toque natural a la mesa, solo queda elegir las velas que completarán la decoración. Estas rosas blancas muy realistas iluminan la decoración en un abrir y cerrar de ojos.
Dirígete a la panadería
© Maisons du MondeSoñamos con darle un mordisco a esta monja dorada tanto como encenderla para que haga efecto. Será perfecto para crear una decoración de ambiente de salón de té.
Un bote pequeño de yogur
© IkeaPara una decoración de mesa con toda simplicidad, manténgase sobrio y opte por una vela vertida en lo que parece ser una pequeña jarra de yogur de vidrio. Original y delicado, aportará un toque de dulzura a cualquier mesa.
Una charlotte de frambuesa
© Maisons du MondeTus niñas también quieren entretener a sus amigas con gran pompa a la hora del té. Para la decoración de la mesa, por lo tanto, ponemos una bonita vajilla rosa empolvado y una deliciosa vela que parece desde lejos como lista para una charlotte de frambuesa.