Una decoración asertiva y atrevida
Prohibido durante mucho tiempo en nuestros hogares, el negro ha demostrado ser un valor en aumento en términos de decoración en los últimos años. Mezcla de los tres colores primarios de rojo, amarillo y azul, el negro es un color neutro que combina con todos los demás. Símbolo de elegancia en la moda, el negro también está en la decoración. Elegante y misterioso, aporta un lado gráfico y de diseño a una sala de estar. Pero ojo, el negro puede resultar agobiante, sobre todo en una habitación pequeña, de ahí la necesaria parsimonia con la que debe utilizarse. En cuanto a la pintura, se puede utilizar en una sección de pared o en rayas en una habitación grande. Evítelo en una habitación pequeña, puede resultar abrumador. En el caso de los muebles, algunos muebles aireados se adaptan especialmente bien al negro como las estanterías o las librerías cuyas líneas rectas resaltarán el lado gráfico. También son adecuados muebles pequeños como mesas de café o sillas. Y para un negro luminoso, piensa en el negro lacado, muy contemporáneo. En la decoración, unos objetos negros dispuestos aquí y allá permiten destacar el soporte sobre el que se colocan. Jarrones, marcos en una pared clara, cojines en un sofá aportan un toque gráfico muy visual. Finalmente, para resaltar el lado gráfico del negro, su asociación con otros colores es fundamental. White parece estar predispuesto a esta asociación. ¡Los objetos en blanco y negro están particularmente indicados y ampliamente resaltados últimamente! Pero para evitar la monotonía, agregue algunos colores más cálidos como amarillo, rojo o rosa …