8 de cada 10 franceses conocen la etiqueta energética
Los 27 estados miembros de la Unión Europea acaban de dar su acuerdo para un nuevo etiquetado de la eficiencia energética de los electrodomésticos en el marco de la Directiva EUP (Energy Using Products) de la Comisión Europea. Tendrá en cuenta el diseño ecológico de los dispositivos al obligar gradualmente a los fabricantes a comercializar productos con menor impacto en el medio ambiente.
Una herramienta para la decisión de compra
Obligatorio adherido a todos los electrodomésticos desde la Directiva Europea de 1992, la etiqueta energética tiene como objetivo informar al público sobre el consumo de energía eléctrica de los equipos domésticos. Además de presentar la marca del producto, sus referencias y otras características en función del dispositivo de que se trate, esta etiqueta es un importante indicador de respeto al medio ambiente. De hecho, clasifica el rendimiento energético de los electrodomésticos con una letra que va de la A (ahorrativo) a la G (muy intensivo en energía). Incluso ahora hay frigoríficos y congeladores clasificados A + y A ++. Según una encuesta realizada en 2006 por TNS Sofres y patrocinada por GIF.webpAM (Grupo Interprofesional de Fabricantes de Electrodomésticos), 8 de cada 10 franceses conocen esta etiqueta y el 75% la tiene en cuenta cuando compran un electrodoméstico. Sin embargo, el 23% dice que lo sabe sin saber exactamente qué es. Como tal, las nuevas etiquetas energéticas, que entrarán en vigor a partir de 2011, proporcionarán una mejor legibilidad de la información para los consumidores. Para los fabricantes, el nuevo reglamento EUP representa un incentivo para mejorar el rendimiento energético de sus futuros productos.
Los dispositivos que consumen más energía desaparecerán en 2010
La nueva medida EUP prevé, en particular, la prohibición de la comercialización de electrodomésticos de las clases B y C a partir del 1 de julio de 2010 para frigoríficos y congeladores, ya que las clases más bajas ya han desaparecido del mercado durante algunos años. Y la clase A desaparecerá a partir del 1 de julio de 2014. A partir del 1 de enero de 2011 aparecerán en las etiquetas energéticas tres nuevos niveles de rendimiento energético superiores a la clase A: A-40% (correspondiente a la actual clase A ++), A-60 % y A-80%, el porcentaje correspondiente al ahorro energético logrado en relación con la clase A. La nueva medida EUP relativa a las lavadoras prevé la prohibición de comercializar aparatos con un rendimiento de lavado inferior a la clase A y superior un cierto umbral de consumo de agua. A partir del 1 de julio de 2011 aparecerán tres nuevos niveles de desempeño energético: A-20%, A-30% y A-40%.
Nueva información obligatoria
Además de la desaparición de las clases menos eficientes y la evolución de la etiqueta energética, el nuevo reglamento EUP también prevé la introducción de nueva información obligatoria en las instrucciones de uso de los electrodomésticos con el fin de minimizar el consumo: disposición óptima de los productos en frigorífico, recomendación de los tipos de detergentes más adecuados según las diferentes temperaturas de lavado, etc. Y para una mejor legibilidad, la nueva etiqueta energética presentará las características de los distintos electrodomésticos (por ejemplo para una lavadora, los niveles de ruido durante la fase de lavado y centrifugado, la carga, el consumo de agua, la capacidad de 'centrifugado, etc. .) en forma de pictogramas. Al servicio del ecoconsumidor y en beneficio del medio ambiente, estas nuevas medidas de la Directiva EUP animarán a los fabricantes a innovar, una y otra vez, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental de sus productos a lo largo de su ciclo de vida. desde su fabricación hasta su eliminación, incluido su uso.