Útil de día y de noche, el sillón de lactancia es imprescindible para elegir con cuidado.
En la habitación del bebé, es muy cómodo para los padres instalar una silla de lactancia para sentarse día y noche con el niño, dormir o alimentarlo. También la elección de la silla es fundamental. El equipo editorial ha pensado en usted y le brinda sus mejores consejos para tomar la decisión correcta.
¿Por qué comprar una silla de lactancia?
La llegada de un bebé da un vuelco a tu vida y te hace adoptar nuevos hábitos. Como amamantar a su hijo, en cualquier momento del día o de la noche. Para amamantar o alimentar con biberón a su recién nacido, es fundamental que esté bien instalado. ¡Especialmente en medio de la noche! Para ello, la silla de lactancia es el mueble perfecto para integrarse en la distribución de la habitación del bebé.
Al permanecer en la habitación del bebé para alimentarlo, lo tranquiliza y facilita su sueño. Esto evita despertar al bebé moviéndolo de una habitación a otra después de alimentarlo.
La silla de lactancia está diseñado para hacer que el tiempo de lactancia sea tan agradable para el bebé como para los padres. Suele constar de cojines mullidos, respaldo y reposabrazos ligeramente inclinados. Algunos modelos incluso ofrecen pequeñas ventajas, como un reposapiés o bolsillos integrados.
La comodidad, criterio fundamental del sillón de lactancia
Al organizar la habitación de su recién nacido, la elección de una silla de lactancia puede ser complicado. El diseño del sillón suele ser un criterio importante, sobre todo si tienes en mente una decoración temática para la guardería. Pero además del diseño, un primer criterio debe ser fundamental: ¡la comodidad! Tenga en cuenta que pasará mucho tiempo en esta silla arrullando o alimentando a su bebé.
Preferiblemente, opte porr un sillón con reposabrazos (para descansar los brazos) y un reposacabezas. También asegúrese de que el asiento esté bien acolchado, para evitar encontrarse en una posición incómoda. No dudes en tener a mano una manta calentita en caso de despertarte por la noche o un cojín.
No dudes en tomarlo unos meses antes del parto para elegir tu silla de lactancia. Esto le permite comparar la comodidad y los precios.
¿Qué silla amamantar o alimentar con biberón?
Para alimentar a su hijo, ya sea con biberón o con leche materna, elija una silla más estable con un respaldo rígido (el lado que se tambalea de la mecedora puede ser peligroso para que pueda volver a ponerse de pie con el bebé). Unos sillones sutilmente curvados permiten una posición del respaldo muy ligeramente alargada, lo que ofrece cierta comodidad para la madre.
También puedes optar por un modelo con reposapiés, para ofrecerle una posición cómoda durante la lactancia.
El asiento de su silla de lactancia debe ser profundo. Sin embargo, tenga cuidado de no hundirse en su silla, especialmente si es muy blanda. Entonces tendría dificultades para levantarse con el bebé en brazos.
Para garantizar una cierta durabilidad a largo plazo de su silla, prefiera un modelo de buena calidad, con tejido grueso y estructura sólida. También puede darle una segunda vida en un dormitorio o sala de estar, cuando ya no necesite amamantar a su hijo.
Para preguntas prácticas, elija un modelo bastante grande que le permite no tener calambres cuando tiene al bebé en sus brazos. Y para evitar problemas de limpieza, opta por una silla lavable y / o extraíble. ¡Esto le permitirá limpiarlo en caso de un pequeño accidente!
La mecedora, la silla ideal para mecer al bebé
La mecedora (o mecedora) es ideal porque te permite mecer sin esfuerzo a la madre y al niño. Su lado tranquilizador y relajante, combinado con su aspecto retro atemporal, hacen que la mecedora sea imprescindible en la habitación del bebé.
Muy de moda, generalmente ocupa mucho espacio. Si la habitación de tu bebé no es muy grande, es mejor optar por un sillón clásico, que requiere menos espacio libre.