Ropa de cama suave que estimula la imaginación.
Un bebé duerme en promedio entre 17 y 18 horas al día durante las primeras semanas, por lo que pasa la mayor parte del tiempo en la cama. Asegurar un ambiente favorable para su sueño es fundamental para su desarrollo y por eso es importante elegir la ropa de cama adecuada para ella. A continuación se ofrecen algunos consejos para dar la bienvenida al bebé con confianza.
Lo esencial para el bebé
La cuna perfecta consta de un protector de colchón para evitar accidentes como regurgitaciones, una sábana bajera, un protector de cuna para proteger su cabeza y un saco de dormir que le servirá de manta. Las mantas, almohadas y sábanas son totalmente desaconsejables para los recién nacidos hasta que tengan la fuerza y la capacidad de liberarse de ellas por sí mismos. Por lo tanto, hasta los dos años usaremos un saco de dormir o un saco de dormir para mantener al bebé abrigado. Después de esta edad, puede cambiarlo por una sábana o un edredón.
El toque decorativo
La elección es tan amplia en ropa de cama para bebés que seguramente encontrará un juego de cama que le gustará. Puedes elegir un conjunto coordinado que utilizará el mismo patrón para el parachoques de la cama, la sábana y el saco de dormir o combinar tu ropa de cama con la decoración de tu dormitorio. Planifica dos juegos para que puedas cambiar de cama sin ningún problema y si tu hijo tiene la piel sensible, opta por la ropa de cama ecológica. Aquí nuevamente, la oferta es tal que encontrará fácilmente un conjunto de algodón orgánico en el tema elegido para su habitación.