Una separación visual
La cocina es el corazón de la casa. A menudo abierta a la sala de estar, esta habitación esencial se ha convertido en más que un espacio para preparar comidas, es sobre todo un lugar de intercambio, convivencia y convivencia. Por tanto, es fundamental contar con una cocina con carácter que se distinga del resto de estancias de la casa. El color debe delimitar los espacios para contribuir a la realización de una cocina claramente definida en oposición a la sala de estar.
Un espacio claramente identificado
La tendencia son las cocinas abiertas al salón. Sin embargo, es fundamental distinguir la cocina del salón para crear una estancia independiente. Para configurar una cocina claramente identificada en su interior, coloque diferentes pisos. Elija un azulejo en la cocina. Esto debe estar en consonancia con el estilo de esta habitación. Puede agregar parquet en la sala de estar. La diferencia en el revestimiento del suelo crea una separación visual entre la cocina y el salón al tiempo que aporta una dosis de originalidad al conjunto. También juega con los contrastes de color optando por el alicatado oscuro en tonos marrones o negros en la cocina y favoreciendo el parquet en tonos claros en el salón. La cocina será entonces un lugar identificable por su ambiente acogedor e íntimo y la sala de estar dará una impresión de convivencia en una nota moderna y de diseño. Refuerce la demarcación entre la cocina y el salón instalando una unidad de almacenamiento entre los dos espacios. Delimitará claramente los dos espacios.
Aislar el espacio de la cocina con color
El color define los espacios. Para no integrar la cocina en la sala de estar como una extensión natural, insista en las oposiciones de colores. Elija colores que contrasten con la habitación contigua. Esto le permitirá delimitar claramente la cocina de la sala de estar. No dudes en elegir colores vivos y chispeantes en la cocina como berenjena, morado, rojo, naranja o verde. Para el salón, puedes optar por colores neutros y contemporáneos en tonos grises, marrones o blancos. Por tanto, la cocina debe ser notable, en oposición a la sala de estar. Para separar la sala de estar de la cocina, elija tonos brillantes para los muebles y el almacenamiento. Esta solución permite llamar la atención y reforzar el aspecto único de la cocina en un abrir y cerrar de ojos. Es importante hacer una cocina notable. Por lo tanto, se trata de configurar una habitación adicional, incluso si esta está abierta en la sala de estar. La cocina debe tener su propia identidad y códigos de color particulares para no mezclarse con la decoración sino existir como una habitación separada.