Alteraciones del vecindario causadas por un animal.

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Anonim

Los ladridos son la molestia por ruido más frecuente.

Tanto en el campo como en la ciudad, las mascotas pueden causar molestias a los demás. Sin embargo, ningún contrato de arrendamiento o reglamento de condominio puede prohibir la posesión de mascotas. Entonces, ¿cuáles son nuestros derechos y deberes?

Los animales: los disturbios más frecuentes del barrio

Más de un tercio de la contaminación acústica es causada por el ladrido de los perros. Y mientras que el perro es el mejor amigo del hombre, el perro de su vecino puede convertirse rápidamente en su peor enemigo. Según el código de salud pública, “ningún ruido en particular debe, por su duración, repetición o intensidad, afectar la tranquilidad del vecindario o la salud del hombre en un lugar público o privado. Uno de estos tres criterios puede, por sí solo, constituir un hallazgo de vecindario. Pero también puede ser un perro que contamine las zonas comunes de un edificio, asuste a transeúntes y vecinos, o incluso muerda.

La responsabilidad del maestro

El dueño de un animal es responsable de ello, ya sea que el animal haya escapado o esté bajo su cuidado. Su responsabilidad puede entablarse ante los tribunales. Luego deberá reparar el daño material o corporal y posiblemente el daño moral sufrido por la víctima. Incluso en ausencia de lesiones corporales, el propietario puede ser condenado si ha excitado a su animal contra un tercero. En algunos casos, el tribunal puede imponer una sentencia de confiscación del animal y colocación en una perrera, o incluso hacer que se le practique la eutanasia. Si se alquila, el amo puede rescindir su contrato de arrendamiento. No obstante, la responsabilidad del propietario puede quedar eximida si es el comportamiento de la víctima el origen del accidente.

El caso de los perros peligrosos

Está prohibido tener un perro de ataque (perro de 1ª categoría). la detención se castiga con una pena de prisión de hasta 6 meses y una multa de 15.000 euros. Los perros de ataque están prohibidos en los lugares públicos y el transporte y no se pueden estacionar en las áreas comunes de un edificio. Los perros de defensa o guardianes (perros peligrosos de segunda categoría) deben llevar correa y bozal en los lugares públicos y el transporte. La detención de perros peligrosos está prohibida para menores y debe ser declarada en el ayuntamiento del lugar de residencia del amo. En general, si un vecino local juzga que un animal presenta un peligro, la ley lo autoriza a detener al alcalde de su municipio. Esto le pedirá al maestro que tome todas las medidas necesarias para eliminar cualquier riesgo.

Molestias causadas por animales de granja

La cría de animales puede causar disturbios en el vecindario debido al ruido o incluso a las molestias por olores. Las grandes explotaciones se rigen por la legislación sobre instalaciones clasificadas. Su funcionamiento está sujeto a normas que deben respetarse bajo pena de sanciones. Por ejemplo, los depósitos de estiércol o excrementos permanentes deben estar al menos a 50 metros de las casas. Los recintos y hábitats para los animales del patio trasero de la familia deben mantenerse limpios, etc. Si un vecino es molestado por una finca, debe contactar con el ayuntamiento para verificar que la instalación cumple con la legislación, especialmente en lo que respecta a las distancias reglamentarias. A veces es difícil para los residentes que han venido a establecerse cerca de una granja existente ganar su caso porque se suponía que debían conocer las molestias antes. Además, las consecuencias de la presencia de una explotación en zonas rurales a veces se consideran normales.

Disturbios en el vecindario causados por un animal: soluciones amistosas

Cualquiera que sea la naturaleza del problema, es mejor intentar resolver la disputa de manera amistosa. De hecho, el simple sentido común (recordatorio de las regulaciones, por ejemplo) a veces es suficiente para resolver el problema. Si el vecino no quiere saber nada y su animal sigue molestándote, puedes: - Contactarte con una autoridad administrativa (Dirección Departamental de Equipamiento o Servicio Molestias de la prefectura). - Avisar a la policía y pedirles que intervengan para determinar el delito. Si la policía acepta, redactará un informe que se enviará al Ministerio Público. El tribunal de policía también puede imponer una multa al capitán e incluso ordenarle que te compense si el demandante ha iniciado una acción civil. Pero no puede ordenar que cese el ruido. - Avisar al alcalde del municipio que, en virtud de sus facultades, deberá reprimir los atentados al orden público.

Alteraciones en el vecindario causadas por un animal: acciones legales

Las acciones legales generalmente requieren la creación de un expediente con pruebas de apoyo: testimonios de vecinos, informe de alguacil, fotos, video, etc.). Procedimiento provisional: En casos urgentes, puede remitir el asunto al presidente del tribunal de distrito o al tribunal de distrito, quien actúa como juez sumario. Tiene el poder de tomar medidas estrictas e inmediatas para poner fin a los disturbios. Procedimiento simplificado Puede utilizar el procedimiento simplificado de declaración en el registro (litigio menos de 4000 €). Tanto el dueño del animal como el denunciante son llamados ante el juez, quien escucha los argumentos de los demás y toma una decisión rápida. Mandamiento judicial para hacer Este procedimiento puede ser utilizado para cualquier disputa resultante del incumplimiento o ejecución parcial de un contrato por un monto inferior a 10.000 €. Por ejemplo, si el dueño de un perro ruidoso no aplicaba lo que se le había impuesto en un proceso sumario. Para presentar una solicitud ante el tribunal de distrito, complete un formulario especial que el registro pone a disposición. Último recurso Para casos de menos de 1.500 €, debe ponerse en contacto con el juez local. Para casos de hasta 10.000 €, debe acudir al tribunal de distrito. Para otros casos, se recurre al tribunal de grande instance. En todos los casos, debe enviar una carta al fiscal para presentar una denuncia.