¡Tome la decisión correcta para una construcción sólida!
Incluso si la elección de los ladrillos es una cuestión de especialistas, hoy le damos algunos consejos en Deco.fr para tomar la decisión correcta durante la construcción o la realización de una pared interior o exterior.
Ampliamente utilizado en la fabricación de paredes y tabiques, el ladrillo ofrece cualidades interesantes tanto a nivel estético como técnico. Existe hoy en muchas formas. Sin embargo, antes de emprender la obra conviene recordar que cada tipo de muro corresponde a un tipo de ladrillo con unas propiedades específicas.
Ladrillo macizo: la elección de la estética y el sentido decorativo.
El ladrillo macizo se utiliza principalmente en la construcción de muros no portantes. Su calidad estética permite dejarlo crudo, aunque muy a menudo se lo encuentra cubierto con yeso, cemento o yeso. Este ladrillo también es muy popular para trabajos decorativos (como alféizares y marcos de ventanas o paredes exteriores). De hecho, es difícil resistirse al encanto del famoso ladrillo rojo, que se puede encontrar en el norte de Francia o en algunos países vecinos.
El ladrillo rojo no requiere aislamiento adicional, es suficiente por sí solo. Es un material natural estable y muy resistente al fuego.
Por otro lado, requiere un conocimiento real a la hora de utilizarlo. Si no es albañil de formación, le recomendamos que confíe la construcción de ladrillos rojos a un profesional de la construcción.
Ladrillo perforado completo: reservado para grandes obras
En cuanto al ladrillo macizo perforado, se utiliza principalmente para trabajos de gran envergadura, principalmente para la construcción de muros de carga o para su revestimiento. Entre los fabricantes, está disponible en muchos modelos, cada uno reforzando más o menos sus características técnicas en términos de aislamiento.
Ladrillo de cartón yeso: ideal para trabajos de tabiquería
Finalmente, el ladrillo de enlucido debe reservarse para dividir o doblar las paredes. Su resistencia tanto a cargas pesadas como a la humedad lo convierte en el ladrillo ideal para este tipo de construcciones. Además, gracias a su inercia térmica, jugará, en cierta medida, un papel de acondicionador de aire natural.
Ladrillo hueco: para cualquier tipo de muro
Es el tipo de ladrillo más utilizado en la actualidad en la industria de la construcción. Se utiliza tanto para paredes como para revestimientos. Fabricado principalmente en terracota, está formado por perforaciones verticales.
Tiene propiedades aislantes muy interesantes para la construcción de una casa. Hay dos tipos de ladrillos huecos:
- El clásico ladrillo hueco
Su grosor es de unas 8 pulgadas, o unos 20 cm. No se puede utilizar solo para garantizar un aislamiento térmico eficaz. Por tanto, es necesario doblar con un aislamiento térmico interior o exterior, según sus deseos.
- Ladrillo de nido de abeja
Mide unos 30cm de grosor. Por tanto, esto refuerza sus propiedades aislantes en comparación con un ladrillo hueco convencional. Evita la pérdida de calor en invierno y mantiene su hogar fresco durante el verano. Es un buen aislante que permite que la humedad penetre en tu hogar. Estas ventajas lo hacen más caro que los bloques de hormigón, ¡pero los ahorros de energía que siguen no deben descuidarse!
Ladrillo refractario: resistente al calor
Es quizás el ladrillo menos conocido por el público en general. La función principal del ladrillo refractario es soportar temperaturas muy altas. Mantiene luego restaura el calor. Gracias a su inercia térmica, este tipo de ladrillo se calienta y enfría lentamente.
Se puede utilizar en casa para la construcción de chimeneas donde la temperatura es muy alta, como una chimenea, una barbacoa o un horno de pizza. Por lo tanto, se puede utilizar tanto para construcciones interiores como exteriores. Se recomienda llamar a un profesional para la instalación.