En 2015, la Fundación Prada abrió un nuevo espacio en el sureste de Milán, una antigua destilería reconvertida en un espacio expositivo dedicado al arte, la cultura y el cine. ¿Quién mejor que el director Wes Anderson, con su visión poco convencional y referencias gráficas, podría amueblar el bar? Allí encontramos su obsesión por los estampados, una paleta de colores pastel y múltiples guiños al universo de sus películas así como a la iconografía italiana que tanto le es querida.
En el bar
© Fleur LouisLos elementos funcionales, cafetera, exprimidor, licuadora y sifón, han sido cuidadosamente elegidos en una versión retro para combinar con la atmósfera especial y atemporal del lugar. El personal también se mantiene actualizado con las chaquetas de uniforme bordadas en rosa con el nombre del café.
Café atemporal
Todo ayuda a recrear un ambiente retro y provinciano descolorido y el bar Luce, aunque recientemente inaugurado, parece haber estado allí durante mucho tiempo. Mitad realista, mitad mágico, tiene el encanto de esos lugares provincianos que nunca han cambiado.
En el techo del Café Luce
© Fleur LouisEl motivo del techo reproduce el del techo de cristal de la Galería Vittorio Emanuele, uno de los lugares emblemáticos del centro de Milán. La parte superior de las paredes también está adornada con un fresco decorativo que utiliza elementos de la galería en versión en miniatura.
Detalles retro
© Fleur LouisElementos retro como el frigorífico rosa o la tipografía utilizada se combinan con el suelo de terrazo, muy habitual en hogares y espacios públicos en Italia, para recrear una atmósfera milanés teñida de reminiscencias infantiles.
Frascos y confitería
© Fleur LouisDulces, helados pastel y pasteles iluminados hacen que el café parezca una fábula. Los tarros de peladillas, una especialidad italiana muy presente en la repostería, ayudan tanto a aportar un toque local como a decorar el café.
Acumulación de botellas
© Fleur LouisLa acumulación de botellas ornamentadas y conservas frente a la decoración de la pared ya cargada se suma al kitsch del conjunto e ilustra el culto del director estético por los objetos cotidianos.
Juke box retro
© Foto Attilio Maranzano - Cortesía de Fondazione PradaLas relucientes máquinas de discos y pinball completan el ambiente retro y juvenil. Es el toque lúdico que nos recuerda que una cafetería no es solo un lugar para comer, sino también un lugar para pasar el rato y relajarse. Te invitan a detenerte un momento y hacer de Café Luce más que un escenario de película, un lugar para vivir.
Las máquinas de pinball Wes Anderson
© Fleur LouisLas máquinas de pinball inspiradas en el universo de Wes Anderson han sido completamente personalizadas y toman los temas de dos películas del director: Aquatic Life y Castello Cavalcanti. Uno está dedicado al mundo submarino, el otro al Molte Miglia, una carrera de coches imaginaria inspirada en la famosa carrera italiana de la Mille Miglia.
Simetrías y repeticiones
© Foto Attilio Maranzano - Cortesía de Fondazione PradaEl gusto de Wes Anderson por los efectos de las simetrías y las repeticiones se puede encontrar en el diseño de Bar Luce. Los globos luminosos, las columnas y el revestimiento de las paredes dan así la ilusión de un reflejo perfecto, aunque el espacio, dividido entre el área de servicio y el dedicado al consumo, no es simétrico en sí mismo.