Estas son las diferentes formas de reaccionar ante un incumplimiento de pago
El alquiler impago es uno de los mayores temores de los propietarios. ¿Cómo seguir siendo rentable en caso de incumplimiento? ¿Cómo manejar una disputa con un inquilino? Respondemos a estas preguntas en este artículo.
Suscribir un seguro contra alquileres impagos
La mayoría de las entidades bancarias te ofrecen contratar un seguro. Entre ellos, el seguro de alquileres impagos puede ser especialmente útil si eres propietario.Por lo tanto, puede estar cubierto en caso de impago por parte de su inquilino. Además de pagarte el importe del alquiler, tu seguro también puede ayudarte con tus trámites administrativos. Algunos seguros también lo protegen contra cualquier daño a su propiedad.
Confíe la gestión del inmueble a una agencia de gestión de alquileres
Confiar su propiedad a una agencia de gestión de alquileres tiene muchas ventajas. Está formado por profesionales inmobiliarios, capaces de gestionar su propiedad de manera eficiente y resolver los problemas con rapidez. Su agencia de gestión de alquileres debe ser capaz de evitar situaciones de alquiler impago. El primer motivo es que la agencia se encarga de seleccionar inquilinos solventes y de confianza, limitando así el riesgo de impago de alquileres, desde el inicio del contrato de arrendamiento. Luego se encarga de cobrar las rentas para pagárselas a usted y de mantener una buena comunicación con el inquilino.
Si aún encuentra un incumplimiento de pago, su agencia de administración de alquileres podrá cubrirlo. De hecho, la mayoría de las agencias cubren el alquiler no pagado, dentro de un límite de tiempo indicado en el contrato. Al igual que los bancos, te ofrecen un seguro contra este tipo de inconvenientes. Además, su agencia de gestión de alquileres se encargará de resolver la disputa por sí misma, con el fin de dejar su mente y su horario en paz.
Comuníquese claramente con su inquilino
Si tú mismo gestionas el alquiler de tu alojamiento, es importante mantener una buena relación con tu inquilino. Para resolver las disputas rápidamente, deberá adaptar su comunicación de acuerdo con el perfil de este último. Si su inquilino ha vivido en su propiedad durante varios años y nunca antes ha tenido un problema de pago, entonces puede iniciar una discusión basada en la confianza.Entonces puedes encontrar una solución amistosa, porque sabes que esta situación no es habitual.
Por el contrario, si tu inquilino acaba de mudarse y ya lo echas de menos, la mejor solución es optar por la comunicación oficial. A continuación, puede enviarle una carta certificada con acuse de recibo para reiniciar el pago del alquiler. Si el aumento no funciona, puede elegir las tres soluciones a continuación.
Solicitar el fiador del inquilino
La mayoría de los propietarios piden a su inquilino que justifique la presencia de un fiador. Este último se compromete a pagar la renta en lugar del arrendatario si éste no puede hacerlo. No dude en ponerse en contacto con el avalista lo antes posible, para que pueda liquidar el pago rápidamente.
Comuníquese con la Caja de Asignaciones Familiares
Sepa que puede contactar con la Caja de Asignaciones Familiares (CAF) si su inquilino suele recibir este tipo de ayudas.Si el alquiler impago supera los dos meses, la CAF puede entonces abonar directamente en tu cuenta las dietas de tu inquilino como guía de compensación. Este proceso puede tardar hasta 6 meses. Para realizar dicha solicitud, deberá remitir a la CAF un cuadro de adeudo, a fin de acreditar la situación de impago de rentas.
Rescindir el contrato de arrendamiento
En caso de que estas soluciones no funcionen, tienes derecho a emprender acciones legales. Entonces son posibles varias acciones. Primero puede iniciar un procedimiento judicial para obtener una orden de pago. Al completar un formulario Cerfa, le pedirá al registro del tribunal de distrito que dirija esta solicitud a su inquilino. Por lo tanto, estos últimos deberán pagar las rentas impagadas en el plazo de un mes.
Si este procedimiento no funciona, puede proceder a la rescisión del contrato de arrendamiento, con el fin de desalojar a su inquilino. Para ello, puede invocar la cláusula de rescisión que figura en su contrato de arrendamiento. El plazo de pago es entonces de dos meses.