¡Riegue temprano por la mañana o por la noche!
Regar el jardín es fundamental para mantenerlo sano, pero no en cualquier momento o de cualquier forma. A continuación, se ofrecen algunos consejos para regar correctamente sus plantas. El momento del riego es muy importante, tanto para las plantas como para evitar el desperdicio. En verano, lo ideal es temprano en la mañana. Pero como esto no siempre es posible, la noche también es propicia y evita la evaporación. Tenga cuidado con el riego durante el día que puede quemar las hojas de ciertas plantas frágiles. La frecuencia de riego depende de la naturaleza del suelo. Para terrenos pesados, una vez a la semana es suficiente. Para suelos livianos, riegue dos o tres veces por semana. Finalmente, el tipo de riego se determinará según la superficie a regar. Para un jardín grande, prefiera un aspersor oscilante o un aspersor (dependiendo de si la superficie es cuadrada o circular). Para áreas pequeñas, una manguera convencional es suficiente como la regadera tradicional. Prefiera una manguera anti-torsión para evitar interrupciones del chorro de agua. Finalmente, para huertos y jardineras, se recomienda el riego por goteo, para un riego suave. Último consejo, recoger la mayor cantidad de agua de lluvia posible, cultivar el suelo con regularidad para una mejor absorción y reducir el riego al mínimo necesario. El agua es nuestro bien más preciado, ¡salvémoslo!