Un truco divertido a menor costo
Se acercan las vacaciones de verano, y con ellas, las ganas de inventar un parque infantil donde los niños puedan entretenerse al máximo (¡la mejor forma de ocuparlos durante estos dos largos meses de verano)! Aquí tienes un montón de ideas fáciles y divertidas para improvisar una a un costo menor, te vayas o no de vacaciones, tengas jardín o no. La buena noticia es que el único (o casi) ingrediente necesario es una simple tela recuperada. Explicaciones.
Tejidos de elección múltiple
Para la creación de una carpa de juegos para niños elegante y económica, obtenemos una vista previa, una tela. Puede ser un mantel que ya no usas, una sábana extra, un trozo de tela, cortinas viejas, un edredón infantil desviado o una mosquitera. Por supuesto, preferimos modelos lúdicos: lunares, rayas de colores, adornados con estampados infantiles o diamantes arlequín. Sin embargo, este vestido de ensueño es un "plus" estético, no una prioridad en sí mismo; a diferencia del tamaño de la tela (2 metros de largo y 1,50 de ancho es el mínimo indispensable si desea configurar un área de cabina real. Los niños son pequeños, ¡pero aún así!). Una vez hecha la elección, habrá que organizarla. Pero primero, planeamos, o no, personalizarlo en una versión express. De hecho, para los amantes de la costura, unos sencillos consejos le permitirán duplicar su encanto y fantasía. Por ejemplo, puedes coserle bonitos acabados, como serpentinas pegadas por todo su contorno o flecos indios, muy de moda. También puede cortar una abertura cuadrada que actuará como una ventana o coser algunos pequeños trozos de una bonita tela para crear un efecto de mosaico. Y si la tela es tres veces más grande, ¿por qué no robar una pequeña parte para hacer una guirnalda decorativa a juego?
Varias posibilidades de instalación
En cuanto a la puesta en escena, las posibilidades son numerosas. Todo depende de la distribución de su interior o jardín y, sobre todo, de la ubicación de la zona de juegos “tex-estilizada”. Por dentro y por fuera, el sistema más fácil de instalar es colgar la tela entre dos “bancos”: entre dos árboles o entre dos muebles (dos sillas y una mesa, por ejemplo). En este caso, solo hay un inconveniente: los niños solo tendrán un techo bajo el cual jugar, pero no “paredes”. Por el contrario, si nos ceñimos a estacas o palos de escoba montados en trío, ¡lo único que tenemos que hacer es cubrirlos con la tela en cuestión para obtener un tipi itinerante! Allí, los niños pequeños jugarán fuera de la vista. ¡Del mismo modo si su habitación está equipada con una cama elevada! En este caso, pellizcamos la tela debajo del colchón y la dejamos caer al piso para conseguir una casa extra. Pero aún hay más original. Utilice un aro de juego, por ejemplo. Cosa la tela (al menos igual a la altura de la habitación) alrededor, luego cuelgue el aro del techo o en la rama de un árbol. Ingenioso, ¿no? Y para los niños rebosantes de imaginación, cambiamos el efecto “casa de juegos” por un “decorado de juego”, siempre de tela. Por ejemplo, para crear una atmósfera pirata, imite los mástiles de un barco plantando 3 lienzos (del más grande al más pequeño) en una estaca en el jardín. Esto es algo para hacer feliz a la gente …