¡Adiós a la cocina, las barras contra salpicaduras se convierten en un estante de almacenamiento!

Anonim

Espacio de almacenamiento inesperado

Última primicia en la carrera: la barra de credenza sale de la cocina. ¿La causa de esta ruptura que se produce después de años de vida en común? La gran limpieza de primavera. Desde su encuentro, giran el amor perfecto. Monsieur la habría hecho descubrir nuevos horizontes, haciéndola viajar a otras habitaciones de la casa. Claro, estar cubierto de joyas, zapatos, bolsos y sombreros es más glamoroso que látigos, cucharones y cuchillos. Conoce la nueva barra de credenza …

Una barra de credenza en el dormitorio.

¡Te estás preguntando qué podría hacer el dormitorio con las barras de credenza! Pues imagina a varios de ellos formando la pared junto al vestidor o al tocador. Con o sin ganchos, acogen todos los pequeños complementos de moda de nuestro armario que queremos destacar: collares, gafas de sol, guantes, corbatas, gorros o bolsos! En resumen, 100% chic.

Una barra de credenza en la entrada.

En la entrada, el principio es el mismo. Fijas solas o en serie en la pared, las barras para salpicaduras se adaptan a todo lo que tiende a colgar por ahí. Las bufandas y pañuelos se enrollan fácilmente, los zapatos de tacón se posan en el talón, las llaves cuelgan con ganchos y las chaquetas hacen su nido con bonitas perchas. Original, ¿verdad?

Una barra de chapoteo en el baño.

En el lado del baño, las barras de la credenza juegan con el toallero. Pero también puedes colgar (siempre usando ganchos), cestas de almacenamiento. Para tener a mano secadores de pelo, cepillos, scrunchies y cremas de cuidado, ¡el sistema de almacenamiento es perfecto!