Ahora con 100 años, el Chester de Poltrona Frau todavía es producido por la marca italiana.
Desde hace casi un siglo, Poltrona Frau consolida su marca en todo el mundo: desde el sillón italiano hasta el clásico Chesterfield o la silla de auto con un acabado impecable, cada pieza imaginada por la marca mediterránea tiene un confort y líneas únicas. Poltrona (oficina central en francés) Frau (que lleva el nombre de su fundador Renzo Frau) tiene 100 años de historia, durante los cuales ha perfeccionado su saber hacer tradicional y su dominio del cuero. Su aniversario es motivo de festividades únicas, marcadas por la publicación de un libro, la apertura de un concurso de diseño para el lanzamiento de la “silla del centenario” y la creación del primer museo Poltrona Frau en Tolentino, Italia. De vuelta en un curso impecable.
Un poco de historia
La historia de Poltrona Frau comenzó en 1912, un período sin preocupaciones que precedió a la Primera Guerra Mundial. Renzo Frau, un joven emprendedor de Piamonte, fundó en Turín ese año una empresa de sofás y sillones cosidos a mano. Materiales preciosos, artesanos cuidadosamente seleccionados, líneas inspiradas… Las creaciones de Poltrona Frau llamaron rápidamente la atención y la empresa experimentó su primer éxito: el Chester. Elogiado por los propietarios de las casas de campo inglesas, este sillón acolchado de asiento bajo es sinónimo de comodidad y descanso. Ahora con 100 años, el Poltrona Frau Chester todavía es producido por la marca italiana y ahora está disponible en varios colores, desde el tradicional taupe hasta el amarillo intenso. A partir de los años 60, la empresa recurrirá a grandes diseñadores para enriquecer su catálogo. Los bestsellers entraron poco a poco en la leyenda, y la actividad Contracts comenzó 20 años después. Al producir la tapicería de automóviles de prestigio, los asientos de primera clase de las aerolíneas más importantes o los asientos de lugares únicos (¡el Parlamento de Estrasburgo, el Disney Concert Hall de Los Ángeles o la Bolsa de Milán!), ¡La firma italiana! cuerdas a su arco y establece su fama mundial. La década del 2000 estuvo dedicada a la compra de grupos de prestigio (Cappellini, Cassina, etc.) y a diversas alianzas. Poltrona Frau se prepara hoy para su futuro, que promete ser tan ilusionante como el centenario que acaba de pasar …
Un catálogo ecléctico
Si Poltrona Frau es sobre todo conocida por sus asientos con un acabado incomparable, no obstante ofrece un catálogo completo, desde accesorios de oficina hasta mesas de centro, camas o comedores. Obviamente encontramos las reediciones de las piezas que han contribuido al éxito de la marca: el Chester, el Vanity Fair y el Dezza, por nombrar algunas. El sillón centenario, elegido por un prestigioso jurado, se presentará en una edición limitada en la próxima Feria del Mueble. Asunto a seguir…