El plomo desaparece de nuestras tuberías
El 25 de diciembre de 2013, se deberán reemplazar todas las tuberías de agua con plomo para reducir el contenido máximo permitido de plomo en el agua potable. Además, las tuberías de cobre aparecen como un material de elección para reemplazar las viejas tuberías. Explicaciones. El decreto del 20 de diciembre de 2011 reduce el contenido máximo de plomo admisible en el agua potable a un umbral de 10 microgramos por litro frente a los 25 actuales. Pero para que se cumpla con esta nueva normativa, el Consejo Superior de Higiene Pública de Francia y la Agencia de Seguridad Sanitaria francesa creen que se deben retirar todas las tuberías de plomo. Y para este reemplazo, el cobre es quizás la mejor opción porque no solo es adecuado para todos los lugares de trabajo, sino que también se ve bien en tuberías expuestas. Pero sobre todo, el cobre no presenta un riesgo para la salud porque preserva la calidad del agua y la salud de los usuarios. Este material tiene propiedades bactericidas, algicidas y fungicidas que evitan la proliferación de organismos patógenos como Legionella. Por último, tenga en cuenta que las tuberías de cobre son muy duraderas y permiten limitar las operaciones de mantenimiento.