La luminaria de estilo Zen se distingue ante todo por sus materiales, en armonía con la naturaleza
Atmósfera refinada, iluminación tenue, tonos claros… El estilo Zen tiene sus códigos y nos ofrece un universo relajante. Su iluminación es un elemento imprescindible para perfeccionar tu decoración, por eso hay que cuidarla en los detalles. ¿Cuáles son los modelos de lámpara preferidos? ¿Cómo distribuirlos en una habitación? Consejo.
Elige tu luz
La luminaria de estilo Zen se distingue ante todo por sus materiales, en armonía con la naturaleza. Por tanto, se prefiere el papel de arroz, la madera flotante, el bambú o incluso la piedra en bruto. ¡No olvides apostar por la sencillez y la sobriedad! La iluminación debe atenuarse para difuminar los tonos suaves. Elija colores apagados para las pantallas, con bases de lámpara armoniosas (topo, blanco, verde mar, gris claro, etc.).
Integra la iluminación zen en su decoración
No dude en multiplicar las fuentes de luz en la misma habitación para distribuir la iluminación de manera uniforme. Las lámparas de estilo zen difunden una iluminación suave y tenue, por lo que se deben instalar varias para iluminar adecuadamente una habitación (y en particular la sala de estar, la sala de estar o la cocina). También puedes jugar la carta de acumulación, con iluminación japonesa, por ejemplo. Varias bolas de papel de arroz suspendidas una al lado de la otra serán el mejor efecto en un pasillo o una estancia zen. ¡Toque artístico garantizado!