Cocina: todo lo que necesitas saber sobre la campana
Protección indispensable para cocinas profesionales, la base de la campana es práctica y estética. ¿Qué lo hace diferente de un salpicadero de cocina? ¿Qué materiales favorecer y cómo adoptarlo? ¡Te contamos todo lo que necesitas saber sobre la parte inferior del capó!
¿Cuál es la diferencia entre el salpicadero y el fondo del capó?
Muchos confunden el protector contra salpicaduras de la cocina con las campanas extractoras. Hay que decir que los dos tienen la misma funcionalidad: la de proteger las paredes de las salpicaduras relacionadas con la cocina (agua, aceite, grasa, vapor, etc.) así como del calor. La base de una campana es una placa o panel de protección que se encuentra encima de la encimera. Su ancho no excede al de la campana. Por tanto, esta es la parte más expuesta a la suciedad. En cuanto al salpicadero, generalmente cubre todo el ancho (de la encimera, el fregadero, la encimera, etc.) del espacio de la pared de la cocina. En otras palabras, ¡la única diferencia entre el salpicadero y la base del capó es en términos de formato!
Credenza o capota? La respuesta a la pregunta es, por tanto, una cuestión de gustos y de la configuración del espacio de la cocina. En cualquier caso, el salpicadero como base de la campana se puede sustituir pero también se puede combinar. Elegir ambos significa dar nuevas perspectivas a las paredes y permitir delimitar los espacios de la cocina reforzando la protección de los revestimientos de las paredes.
Las reglas a saber a la hora de elegir una campana extractora
La base de la campana debe soportar las altas temperaturas que emiten las placas de cocción. Es por eso que las campanas a menudo se diseñan en acero inoxidable o vidrio de seguridad. Y por una buena razón, estos materiales son perfectamente resistentes al calor y la suciedad. El vidrio, por ejemplo, es muy resistente a los impactos y puede soportar temperaturas de hasta 500 ° C. Además de ser resistentes al paso del tiempo, estos dos materiales también tienen la ventaja de ser fáciles de mantener. Se prefiere el acero inoxidable cepillado para evitar rayones.
Nota: Cuanto más delgada sea la placa inferior de la campana, más económica será. Las láminas de acero inoxidable y vidrio de seguridad tienen generalmente un grosor de entre 5 y 10 mm. Son perfectos para ser instalados según norma (a 10 cm de las placas de cocción). En cuanto a las placas de vidrio, quieren ser más gruesas. También tiene la ventaja de incorporar enchufes eléctricos directamente en la encimera.
¿Qué materiales para qué look?
En términos de estilo, el acero inoxidable está disponible en acabado pulido o cepillado. Gracias a su color brillante, el acero inoxidable aporta un toque decididamente moderno a la cocina. Podemos imaginarlo perfectamente en un interior contemporáneo o con decoración industrial. Pero también puede causar sensación en una casa de estilo rústico si se combina con materiales rústicos como una encimera de madera en bruto. En cuanto al vidrio, los acabados son más numerosos: opaco, brillante, mate o tintado … El vidrio también está disponible en múltiples colores y tiene la ventaja de reflejar la luz. Es decir, la base de cristal de la campana encaja tanto en espacios pequeños como grandes y ¡sabe adaptarse a todos los estilos decorativos!