Un techo dañado o mal cuidado, con malas hierbas que pueden levantar las tejas, y la fuga está casi garantizada. Por lo tanto, en lugar de limpiar su casa, es mejor prestar atención a su techo y realizar un mantenimiento simple con regularidad.
Mantener un techo: limpiar a mano
Al menos una vez al año, es bueno subir al techo para comprobar su estado y evitar la aparición de musgos y otros líquenes que puedan dañar las tejas. No olvide las reglas de seguridad relativas al uso de la escalera: coloque la escalera contra el canalón, de manera que sobresalga del techo al menos 1 metro, inclínela entre 65 ° y 75 °. Recuerde asegurar su estabilidad y accesibilidad. Sube con tijeras de podar y un cepillo rígido húmedo. Lo primero que hay que hacer es cortar primero la hierba que puede haberse apoderado de la cuneta y que amenaza con trepar por las baldosas. Tenga cuidado de no enviar los escombros cortados por el bajante, es mejor proporcionar un balde para recogerlos. Luego, solo queda ubicar las baldosas sucias o ennegrecidas y restregarlas con el cepillo rígido. Nuevamente, la suciedad se puede recoger y poner en un balde. Para garantizar una limpieza suficiente en el bajante, se puede colocar un control deslizante en su entrada para permitir que el agua fluya mientras retiene los desechos. En el otro extremo de la canaleta, puede ser conveniente vigilar la limpieza del pozo de registro por donde llega el agua y, si es necesario, limpiarlo o desbloquearlo.
Mantener un techo: con productos
Además del mantenimiento manual, existen productos para combatir las malas hierbas o para prevenir su aparición en el techo. El antiespumante se puede rociar y dejar sobre las baldosas durante una semana. Luego, simplemente limpie el techo con un cepillo o un limpiador de baja presión. También es posible el uso de lejía diluida en agua. Existen otras soluciones para proteger el techo de la lluvia o las heladas. El producto se puede rociar y no enjuagar. Después de un día de aplicación, es posible probar su eficacia echando agua sobre las baldosas y asegurándose de que fluya bien.