Ya sean hijas del aire, que buscan su comida en la atmósfera, o terrestres, las orquídeas nunca dejan de fascinar con su elegancia. Muy pretencioso el que pretenda conocerlos a todos, tantas especies están dentro de esta familia. Hay entre 25.000 y 30.000, la gran mayoría de ellos de regiones tropicales. Nada es más difícil que elegir entre ellos. Cymbidium y Phalaenopsis, fáciles de cuidar y con abundante floración, son valores seguros. También se puede sucumbir a la forma original, en "zapato de Venus", del Paphiopedilum. Pero, ¿por qué necesariamente razonar por variedad? El color también es un buen criterio de elección. ¡Exploremos con estas diez variedades que juegan la carta de los tonos de amarillo y naranja!
Oncidio híbrido amarillo
© J-F. MahéEl generoso Ondidium amarillo ofrece el espectáculo de decenas de flores amarillas parecidas a mariposas que parecen bailar ante nuestros ojos.
Delicia de naranja Brassada
© J-F. MahéMuy florífera, Brassada Orange Delight ofrece un auténtico espectáculo con sus flores en forma de estrella.
Paphiopedilum
© J-F. MahéCómo no dejarse intrigar por la forma única del Paphiopedilum, también apodado "Pezuña de Venus" debido a su labio, cuya forma puede compararse con la de un bolso o bolso.
Dendrobium nobile
© J-F. MahéFlorífera, fragante, fácil de mantener: ¿por qué no dejarse seducir por un Dendrobium nobile?
Cymbidium amarillo
© J-F. MahéLos cymbidiums son conocidos por su espectacular floración y facilidad de cultivo. Esta es la variedad recomendada para empezar a cultivar orquídeas, todos pueden encontrar lo que buscan entre la multitud de colores disponibles.
Phalaenopsis amarilla
© J-F. MahéAquí hay una Phalaenopsis amarilla, el género que viene en varios miles de híbridos de diversas formas y colores.
Oncidium tigre sol
© J-F. Mahé¡Qué picos en este tigre de Oncidium de sol de tigre y dos tonos!
Paphiopedilum primulinum
© J-F. MahéPaphiopedilum primulinum se distingue por sus pétalos estrechos y curiosamente encrespados.
Cattleya
© J-F. MahéOriginaria de América, la Cattleya se distingue por sus flores grandes y generalmente muy fragantes.