Descubre los diferentes tipos de SCPI y sus ventajas
Únete para invertir fácilmente en inmuebles de alquiler gracias al SCPI.
¿Qué es un SCPI?
El concepto de Société Civile de Placement Immobilier (SCPI) entró en la legislación francesa a finales de 1970. Este tipo de sociedad permite adquirir bienes inmuebles con fines de alquiler. Los socios que integran una SCPI pueden dirigirse a varios tipos de inversiones, como viviendas, oficinas o locales comerciales. El propósito de un SCPI es generar un retorno a través de la gestión de la inversión y el alquiler de bienes inmuebles.
Gestión de capital
Los socios de una SCPI pueden elegir entre dos métodos de gestión de capital. Pueden optar primero por un SCPI con capital fijo. Esto significa que solo los períodos de aumentos de capital pueden permitir a los inversores potenciales suscribir acciones en el SCPI. Durante estos períodos, se dice que la capital está “abierta”. Por el contrario, un SCPI con capital variable no tiene esta restricción. Por lo tanto, es más fácil para los inversores comprar o vender acciones. La recaudación de fondos puede continuar hasta que se alcance el techo definido por los gerentes de la compañía de inversión inmobiliaria.
Las diferentes categorías SCPI
La actuación SCPI
Como su nombre indica, este tipo de empresas tiene como objetivo generar la mayor rentabilidad posible y potenciar su capital. Los inversores que poseen acciones de la empresa reciben regularmente ingresos en forma de dividendos a cuenta.Esta distribución puede ser tanto mensual como trimestral o incluso semestral.
Este tipo de empresa se compone de varias categorías distintas. Estos incluyen el SCPI:
- Diversificada, cuyo patrimonio está formado por diversas edificaciones como oficinas, viviendas o comercios.
- Comercios, que gestiona una cartera de comercios y tiendas.
- De oficinas, que consiste, como su propio nombre indica, en edificios de oficinas.
- Especializada, que concentra sus inversiones en áreas muy concretas como edificios del sector sanitario o bancario, por ejemplo.
- Regional, cuyas inversiones se encuentran fuera de la región de París.
- Europeo, cuyas inversiones se encuentran fuera de Francia.
El impuesto SCPI
La exención del impuesto inmobiliario es el principal objetivo de este tipo de SCPI.Las inversiones en alquiler se orientan, por tanto, hacia mecanismos como la ley Pinel, el déficit de suelo o la ley Malraux. Este tipo de empresa supone la gestión de varios condicionantes, ya que habrá que adaptarse a todas las condiciones de elegibilidad de cada dispositivo. Por lo tanto, es necesario hacer un balance de su capital y tener una visión a largo plazo. La ley Pinel, por ejemplo, impone un alquiler de 6 a 12 años.
El SCPI de valor añadido
Este tipo de SCPI difiere de los otros dos en varios aspectos. Su principal objetivo es, en primer lugar, capitalizar bienes inmuebles. Para ello, los inversores se están moviendo hacia edificios que tienen un alto potencial de plusvalía en la reventa. La compensación del inversor también difiere de los otros dos tipos de empresas. De hecho, un SCPI de plusvalía distribuye muy pocos ingresos por trimestre o semestre, o incluso ninguno. El objetivo se centra más en la revalorización de las acciones de cada uno.
¿Por qué invertir en este tipo de empresas?
La sociedad civil de inversión inmobiliaria tiene varias ventajas. En primer lugar, facilita la inversión en bienes raíces, porque no requiere un capital inicial muy alto. Por lo tanto, es posible adquirir sus primeros bienes sin tener que recurrir a una hipoteca que luego deberá pagar.
La sencillez de adquisición va acompañada también de la sencillez de gestión. De hecho, los inversores no administran su propia propiedad. Por lo tanto, pueden liberarse de todas las tareas que requieren mucho tiempo, como el cobro de alquileres, la investigación y los intercambios con los inquilinos o el inventario de accesorios. La gestión de la propiedad corre a cargo de la propia SCPI o de una agencia de gestión de alquileres.
La sociedad de inversión inmobiliaria civil también proporciona cierta seguridad financiera. Los partícipes reciben ingresos regulares o ven sus acciones revaluadas regularmente.
Finalmente, la última ventaja que podemos mencionar incluye las otras tres. El SCPI permite prepararse para la jubilación generando ingresos y construyendo un patrimonio inmobiliario con total seguridad.