Ventilador de techo o de pedestal, nuestro consejo para desempolvarlo de forma segura
El dispositivo más útil del verano debería limpiarse antes de su uso. Sí, pero ¿cómo se limpia el ventilador de forma eficaz y, sobre todo, de forma segura en casa? El editor le da consejos sobre cómo limpiar y utilizar completamente su electrodoméstico en verano.
¿Por qué limpiar tu ventilador?
Este práctico dispositivo para refrescarse cuando el calor está encendido acumula polvo constantemente en sus aspas y en el interior de su rejilla. Sin embargo, ¡nadie quiere recibir aire fresco cargado de finas partículas en la cara! Es por eso que es esencial limpiar bien su dispositivo antes de usarlo para evitar respirar el polvo durante todo el día.
Limpiar un ventilador de techo
Ventilador, abordamos las palas largas con un paño suave. Izado en una trona muy estable (cuidado con la pérdida de equilibrio) el ventilador se pule suavemente, antes de lavar cuidadosamente las aspas con una esponja empapada en agua caliente mezclada con jabón de Marsella. Una vez que el dispositivo está completamente seco, se vuelve a limpiar con el paño. Si quedan escombros diminutos atascados, desenvainamos el cepillo de pelo largo para recuperarlos.
Limpiar un ventilador de pie
En el caso de un ventilador de pie, no solo lo apagamos, sino que lo desenchufamos para evitar cualquier incidente desafortunado, luego desatornillamos meticulosamente la rejilla (consulte el manual de instrucciones del aparato). Una vez que su ventilador esté deshuesado, aspire suavemente. Durante este tiempo, prepare una palangana con agua caliente decorada con jabón de Marsella y deje flotar en ella las diversas piezas de repuesto del dispositivo. Luego enjuague las partes con agua limpia y asegúrese de secarlas bien con una toalla (¡cuidado con la humedad!). Finalmente, coloque el paño suave.
El truco a saber: medias de nailon
El nailon tiene la cualidad de capturar el polvo de forma eficaz. Si no tiene un trapo, use medias viejas y dañadas que tire a la basura. Si lo desea, ate una media de nailon al mango de un plumero para llegar a las áreas difíciles de su abanico.