Conceptos erróneos sobre las trufas

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Anonim

¿Qué tal si cultivas trufas en tu jardín? ¿Utopía? ¡No, ahora la ciencia ofrece este placer a los jardineros!

La trufa es el fruto de un micelio, de lo contrario un hongo, que vive en ósmosis con las raíces y raicillas de un árbol. Pero ahora la trufa puede salir del campo de sus regiones favoritas para instalarse en su jardín. El sistema de raíces de un árbol de trufa no es ni más ni menos que el asiento de una simbiosis entre el árbol y el hongo. Esta simbiosis tiene lugar a través de las micorrizas, órganos que pertenecen tanto al hongo como al sistema radicular del árbol. Hasta ahora esta simbiosis se ha realizado de forma aleatoria y natural. Ahora la ciencia está proporcionando a los jardineros una forma de obtener árboles de trufa en su jardín.

¡Consigue un árbol de trufas en tu jardín!

Hoy en día existen en el mercado plantas micorrízicas de diferentes especies arbóreas. Abedul, carpe, roble, avellana, tilo, cedro, pino austríaco o pino laricio de Calabria, son así micorrizas en macetas y podrán desarrollarse en su hogar con, después de unos años, la apariencia del precioso diamante negro. ¡No es necesario tener un gran jardín para instalar un avellano! Las plantas vegetales son micorrizas con dos tipos de "Tuber": melanosporum (o trufa negra del Périgord) para regiones de clima templado, oceánico o mediterráneo; uncinatum (trufa de Borgoña) para las regiones continentales. A la trufa le gustan los suelos calcáreos, por lo que la elección del suelo de plantación sigue siendo fundamental. Si tiene un suelo de piedra caliza que no es demasiado pesado, bien ventilado, no demasiado rico en materia orgánica y un pH entre 7.5 y 8.5, tiene todas las posibilidades de obtener trufas en su jardín. Sin embargo, deberá tener paciencia mientras el árbol crece lo suficiente.