¡Un arbusto de bayas muy fácil de conseguir!
La grosella roja se considera uno de los arbustos frutales más resistentes. Su fructificación generosa y abundante te permitirá cosechar más de 5 kg de grosellas por planta cuando las condiciones sean favorables. Plantar una grosella no es nada complicado y si eres nuevo en la jardinería, esta primera experiencia será aún más gratificante.
Si las grosellas son agradables de degustar en el acto, no obstante son deliciosas en mermeladas, pasteles y jaleas, ¡e incluso en sorbetes! Blancos o rojos, harán las delicias de todos los aficionados, ya sean jardineros o paladares exigentes. Cuidado con los pájaros, mirlos y estorninos que también saben muy bien de qué se trata y no se privarán de tan bonito festín. Coloque una red por encima de los pies cuando las grosellas empiecen a tomar color. La plantación con raíces desnudas se realiza de octubre a noviembre o de febrero a marzo. En contenedores, puedes plantarlos todo el año. La grosella espinosa teme el calor, por lo que estará a gusto en un lugar ligeramente sombreado y fresco, pero con poco viento.
Dificultad : fácil Costo : menos de 10 € por pie Herramientas necesarias : - Una pala - Una regadera
Paso 1: elija una ubicación adecuada.
Plantada sola, a la sombra de un avellano y protegida por un muro al oeste, la grosella estará a gusto. También se puede plantar en setos, o incluso en espaldera. Su altura adulta ronda los 1,5 metros. En la medida de lo posible, se debe evitar un lugar demasiado húmedo. Un suelo bien drenado le será favorable.
Paso 2: cava el hoyo
Con una pala, cava un hoyo de unos 40 cm de profundidad. Agregue un poco de abono bien descompuesto o tierra para macetas hasta un grosor de unos 10 cm.
Paso 3: saca el cepellón
Suavemente, mientras amasa la olla, extraiga suavemente las raíces del recipiente.
Paso 4: airear las raíces
Las raíces externas siempre deben extenderse un poco para favorecer el enraizamiento de la planta, pero no demasiado y con mucha delicadeza para no dañarlas.
Paso 5: coloque el pie en su lugar
Coloque la muestra en el fondo del hoyo y doble la tierra hacia los lados, apisonando uniformemente para evitar que entre demasiado aire dentro del hoyo.
Paso 6: Termina formando un bol pequeño en su base.
Después de empacar la tierra, y para circunscribir los riegos, formar una pequeña cuenca alrededor del pie.
Paso 7: regar el pie
Ahí tienes, se acabó. Todo lo que tienes que hacer es esperar tus primeras pasas de Corinto. La vendimia se realiza una o dos veces por semana cuando alcanzan la madurez entre junio y agosto según la variedad. Recógelos cuando cambien de color. Las grosellas no se conservan una vez recolectadas, 2 días como máximo, ¡así que prepárate para las mermeladas!
El año siguiente
La poda se suele realizar en invierno y la recolección en verano. El tamaño no importa el primer año, pero será necesario airear bien el pie los años siguientes para favorecer la polinización de las forrajeras. En el otoño, cortarás las ramas internas en la base, que son las más antiguas (son más oscuras). Dale a cada rama un poco de facilidad cortando las que se tocan y se cruzan. También corta madera muerta y pequeños brotes internos que no darán nada. Luego, reducirá los tallos externos del año a la mitad de su altura. Nuestros videos de jardinería y jardinería