¡Abran paso a la suavidad y ligereza! Los colores empolvados se adueñan de la decoración interior para revelar una atmósfera delicada y femenina. Desde el dormitorio hasta el baño, pasando por la cocina o el comedor, los tonos crema, rosa pálido, topo o gris claro marcan la pauta. Demostración.
Atmósfera polvorienta en el dormitorio.
© Volar### Una manta de algodón, un juego de cama de lino, cojines de terciopelo o seda; Eso sí, el contraste de materiales tiene algo para enriquecer esta decoración de dormitorio tan poética que combina beige, rosa claro y morado. Y como cualquier ambiente femenino que se precie merece un toque bucólico, una rama de cerezo que se escapa de un gran jarrón transparente sublima el conjunto. Corazonada.
Atmósfera polvorienta en el baño.
© Cedeo### Más femenino que nunca, el baño está teñido de un bonito color rosa empolvado. Las formas voluptuosas de una pequeña cómoda de hierro forjado y la elegante silueta de una bañera con forma de garra de león completan esta sofisticada decoración con un toque retro. Algo para darnos ideas …
Ambiente polvoriento en la habitación de las niñas
© Cedeo### Variación de tonos pastel en las habitaciones de las niñas, desde el rosa pálido hasta el hilo gris. Aquí no se deja nada al azar. Los cojines de terciopelo bellamente colocados en la cama evocan la suavidad de la habitación. Con el mismo espíritu, pinturas de danza clásica decoran el papel tapiz de lunares rosa. ¡El escenario ideal para los pequeños soñadores!
Ambiente polvoriento en la cocina.
© Objetivo### ¡Efecto base en la cocina! El color ruibarbo de las paredes se refleja en los muebles blancos para darle un buen aspecto a la habitación. La interpretación es cálida y femenina.