Un práctico accesorio
Algunos accesorios de almacenaje son unos auténticos aliados en cualquier estancia de la casa. Por ejemplo, la canasta encontrará su lugar tanto en el baño como en la cocina o en la sala de estar. Descubre sus múltiples usos para ayudarte a adoptarlo.
Una canasta en la sala de estar
¡En la sala de estar, la canasta no solo será un accesorio de almacenamiento! Será un verdadero objeto decorativo para poner en escena en tu salón. Puedes elegir un modelo que coloques cerca del sofá para guardar algunas revistas o en la mesa del salón para tener siempre algo de beber. Si tienes chimenea, este será, por supuesto, el accesorio ideal para guardar tus leños.
Una canasta en la habitación del niño.
En la habitación del niño, la cesta será un auténtico aliado del almacenamiento porque será fácil de usar incluso para los más pequeños. Por ello, adoptamos cestas de varios tamaños que permitirán a los niños guardar sus juguetes en un abrir y cerrar de ojos. Una canasta para peluches, otra para muñecos, una más pequeña para lápices y rotuladores… Una buena forma de enseñar a los niños a organizarse.
Una canasta en el baño
En el baño, la canasta ha encontrado su lugar para la ropa sucia, pero tenga en cuenta que este no será su único uso. No solo podrás adoptar uno para la ropa limpia mientras esperas el planchado, sino que también podrás apostar por modelos más pequeños que luego se utilizarán para almacenar productos de belleza.