Preferiblemente, haga que le limpien la chimenea en primavera.
El barrido de la chimenea es una obligación reglamentaria, pero también una cuestión de seguridad. El punto sobre lo que necesita saber.
Deshollinador: una obligación legal
Tan pronto como tenga una chimenea y la use, debe hacer que la barran regularmente (una o incluso dos veces al año) para cumplir con la RSDT (Normativa Departamental de Salud Estándar) de su lugar de residencia. Esto incluso si su compañía de seguros no lo impone en su contrato de vivienda integral. La ley estipula no solo que los conductos interiores y exteriores deben mantenerse barridos con regularidad, sino también que el barrido debe ser realizado por un deshollinador maestro. Esto le dará un certificado de deshollinador, para guardarlo en un lugar seguro.
Deshollinador: seguridad y ahorro energético
Limpiar tu chimenea te permite deshacerte de hollín, alquitrán y cenizas que, al quedar atrapadas en la chimenea, sirven de aislante, reduciendo las emisiones de calor y generando un mayor consumo de madera. El deshollinador también es una cuestión de seguridad. Reduce el riesgo de intoxicación pero también el riesgo de incendio. Finalmente, el deshollinador, al eliminar las partículas del conducto, contribuye a la lucha contra la contaminación atmosférica.
Deshollinador: ¿desde arriba o desde abajo?
Si existen ambas formas, los deshollinadores de hoy están equipados para trabajar desde abajo. Todavía usan el famoso erizo, un cepillo extendido por varios postes flexibles (esto permite emparejar los ángulos del conducto) que se atornillan entre sí hasta alcanzar la longitud necesaria. El conducto se limpia con un fuerte movimiento hacia adelante y hacia atrás que suelta la suciedad de abajo hacia arriba. El deshollinador, que se ocupó de proteger el suelo y los muebles circundantes, acaba aspirando con un potente dispositivo.
Deshollinador: información práctica
Un barrido suele durar media hora y cuesta entre 40 y 60 euros (precio que generalmente se cobra por el tiro de la chimenea de una casa). Preferiblemente, haga que le limpien la chimenea en primavera cuando deje de disparar. Si hace esto en el otoño, corre el riesgo de tener que esperar mucho tiempo.