Limpieza con gafas y guantes de protección.
Encimeras de cocina o accesorios de jardín … el zinc es popular. ¿La razón de su éxito? Su apariencia brillante. Es mejor arremangarse para limpiarlo y revivir su brillo. He aquí cómo hacerlo. Antes de limpiar el zinc, ¡tenga cuidado! En vista de las sustancias peligrosas a utilizar, usamos guantes y gafas como protección, y la sesión puede comenzar.
Zinc: misión de limpieza y brillo
Para limpiar el zinc, simplemente diluye un vaso de amoníaco en un litro de agua. Después de mojar un cepillo en esta mezcla, solo hay que frotar las superficies y los objetos afectados, dejar actuar durante 5 minutos y luego enjuagar con agua limpia. Para que brille, primero pasamos un paño empapado en una solución de hidróxido de sodio al 6% sobre la superficie de zinc, antes de enjuagar. Luego vierta un litro de agua en un recipiente, en el que se agregan 50 g de vitriolo. Después de empapar un paño en la mezcla, el material se frota y luego se enjuaga.
¡Viva el zinc!
Con vaselina como fórmula mágica, ¡nos despedimos del óxido! Basta con dejar actuar la crema durante 48 horas, lavar con abundante agua y luego secar. Y para asegurar de una vez por todas la longevidad del zinc, se piensa cubrirlo con cera microcristalina o barniz marino para protegerlo.